Espero expectante que lleguen los días del II Congreso Universitario de Comunicación y Eventos, que se celebrará el 3, 4 y 5 de abril en el hotel Melia Princesa de Madrid, y que es, sin lugar a dudas, la única cita en España que aglutina a los distintos actores de la industria de eventos (agencias, clientes y proveedores), a las instituciones públicas, a los profesionales y a los estudiantes que han apostado por el protocolo y la organización de eventos como futuro profesional, y todo ello bajo el paraguas de la prestigiosa Universidad Complutense de Madrid y de la Universidad Camilo José Cela, pionera en la impartición de estudios oficiales en protocolo y organización de eventos. Un congreso lleno de atracción, vanguardia y modernidad. Francamente, me encanta.
Es alentador que se promuevan encuentros alejados prácticas que veo en otros encuentros del sector desde hace años, donde los organizadores están más preocupados en garantizar plazas ‘a gastos pagados’ y con el dinero de los demás, para reunir a los amigos y de paso sumar puntos para venderse mejor.
Es alentador que exista un foro conectado con el día a día de la actividad del organizador de eventos, donde se pueda hablar de la realidad de la industria, de las buenas y malas prácticas, de las tendencias, vanguardias y sobre todo de las realidades, y esto precisamente los consigue este congreso que de forma inaudita ha construido un espacio donde van a cohabitar la práctica profesional, los intereses profesionales, el aprendizaje a serlo, el corpus científico que debe sustentar la formación de quienes se dedican a la compleja tarea de comunicar en vivo y en directo, o gestionar departamentos que son verdaderas herramientas de comunicación estratégica. Juntará a personajes mediáticos, sacados de la fama que da la TV que tanto llega al público y por tanto nos da visibilidad, a creativos, investigadores, profesores, estudiantes, profesionales… gente que sólo quiere estar porque necesita dejarse seducir por la magia de los eventos, de su poder de comunicar.
Es alentador cerrar los ojos y olvidar a todos aquellos que durante años no avanzaron nada, nada, nada….., en hacer profesión, a aquellas asociaciones que tienen perdido el rumbo y que siguen mirándose al ombligo preguntándose quiénes son y a dónde van, más preocupadas por figurar que por actuar y sin ningún tipo de diálogo con la sociedad y sus interlocutores.
Mientras tanto, congresos como este demuestran que sí hay profesión, si hay industria, si hay una actividad de vital importancia para la economía española a juzgar por su aportación al PIB, y además sí hay futuro.
Este post sólo es la introducción, de forma paulatina os iré facilitando ‘pildoras’ de cada uno de los contenidos con la sana intención de que ustedes juzguen, comparen y compren.
Espero expectante que lleguen los días del II Congreso Universitario de Comunicación y Eventos, que se celebrará el 3, 4 y 5 de abril en el hotel Melia Princesa de Madrid, y que es, sin lugar a dudas, la única cita en España que aglutina a los distintos actores de la industria de eventos (agencias, clientes y proveedores), a las instituciones públicas, a los profesionales y a los estudiantes que han apostado por el protocolo y la organización de eventos como futuro profesional, y todo ello bajo el paraguas de la prestigiosa Universidad Complutense de Madrid y de la Universidad Camilo José Cela, pionera en la impartición de estudios oficiales en protocolo y organización de eventos. Un congreso lleno de atracción, vanguardia y modernidad. Francamente, me encanta.
Es alentador que se promuevan encuentros alejados prácticas que veo en otros encuentros del sector desde hace años, donde los organizadores están más preocupados en garantizar plazas ‘a gastos pagados’ y con el dinero de los demás, para reunir a los amigos y de paso sumar puntos para venderse mejor.
Es alentador que exista un foro conectado con el día a día de la actividad del organizador de eventos, donde se pueda hablar de la realidad de la industria, de las buenas y malas prácticas, de las tendencias, vanguardias y sobre todo de las realidades, y esto precisamente los consigue este congreso que de forma inaudita ha construido un espacio donde van a cohabitar la práctica profesional, los intereses profesionales, el aprendizaje a serlo, el corpus científico que debe sustentar la formación de quienes se dedican a la compleja tarea de comunicar en vivo y en directo, o gestionar departamentos que son verdaderas herramientas de comunicación estratégica. Juntará a personajes mediáticos, sacados de la fama que da la TV que tanto llega al público y por tanto nos da visibilidad, a creativos, investigadores, profesores, estudiantes, profesionales… gente que sólo quiere estar porque necesita dejarse seducir por la magia de los eventos, de su poder de comunicar.
Es alentador cerrar los ojos y olvidar a todos aquellos que durante años no avanzaron nada, nada, nada….., en hacer profesión, a aquellas asociaciones que tienen perdido el rumbo y que siguen mirándose al ombligo preguntándose quiénes son y a dónde van, más preocupadas por figurar que por actuar y sin ningún tipo de diálogo con la sociedad y sus interlocutores.
Mientras tanto, congresos como este demuestran que sí hay profesión, si hay industria, si hay una actividad de vital importancia para la economía española a juzgar por su aportación al PIB, y además sí hay futuro.
Este post sólo es la introducción, de forma paulatina os iré facilitando ‘pildoras’ de cada uno de los contenidos con la sana intención de que ustedes juzguen, comparen y compren.